Durante una nueva reunión de la Comisión Especial en Rosario, familiares de las víctimas exigieron respuestas, empatía y justicia por la tragedia del fentanilo contaminado.
Redacción Periodismo Parlamentario ✍️ Diario Digital CM24HORAS
La Comisión Especial de Seguimiento e Investigación sobre Fentanilo Contaminado y/o Adulterado, presidida por la diputada nacional Mónica Fein (Encuentro Federal), realizó una nueva reunión informativa en la ciudad de Rosario, una de las localidades más afectadas por la tragedia.
La apertura estuvo a cargo de María Eugenia Schmuck, presidenta del Consejo Municipal de Rosario, quien destacó que “Rosario ha sido una de las más golpeadas” y enfatizó que “los controles y la trazabilidad no pueden ser una opción, sino una obligación”. Además, reafirmó su compromiso para que los hechos se esclarezcan y sean sancionados como corresponde.
Por su parte, Mónica Fein recordó que la comisión fue creada por unanimidad en la Cámara de Diputados “para investigar cómo pudo haber ocurrido esta tragedia y qué debe cambiar para evitar que se repita”. En esa línea, Silvana Giudici (PRO) sostuvo que se está realizando “un trabajo muy sólido detrás de escena para comprender las causas del hecho y ofrecer respuestas completas a las familias”.
Asimismo, Victoria Tolosa Paz (UxP) valoró la búsqueda de consensos en el seno de la comisión, destacando que esta séptima reunión “refleja madurez política y compromiso en la búsqueda de la verdad”.
Durante el encuentro, los familiares de las víctimas brindaron conmovedores testimonios sobre la falta de empatía institucional y la necesidad de justicia.
Lilian Gisela Amin, hija de Inés Ruiz, expresó su dolor al enterarse por los medios de la verdadera causa de la muerte de su madre. “Mi mamá estaba sana, y se muere envenenada. Nos dijeron que fue una falla multiorgánica, sin explicación. Pido que su muerte no sea en vano y que se haga justicia”, señaló.
Ana María Carranza, madre de Ana Belén Salazar, denunció la mala actuación del Hospital Italiano de Rosario, donde falleció su hija. “Mi hija se descompensó y me la entregaron muerta. Si fuera por mí, clausuro ese sanatorio, no debería existir más”, declaró.
También habló Valeria Cuaglia, hija de Roberto Cuaglia, quien ya había testificado en la Cámara de Diputados. “Llevé a mi papá a un lugar para que se cure, y con el mismo remedio lo mataron”, relató con indignación.
En tanto, Estefanía Ferrari, hija de Luis Ferrari, calificó lo ocurrido como “una masacre” y lamentó que “tengamos que exigir calidad y acceso a la salud cuando es un derecho universal”. A su vez, Claudia Pérez denunció la compra de medicamentos “a mitad de precio” y repudió la actitud de las autoridades: “fue inhumano, no nos tuvieron compasión”.
El encuentro concluyó con la participación de otros familiares como Ivana Griselda Esteban, Mercedes Soto López, Vanesa Vilches, María Noelia Zanni y Rocío Correa, quienes coincidieron en la exigencia de verdad, justicia y responsabilidad institucional.
La comisión continuará su trabajo en los próximos meses para reunir nuevas pruebas, evaluar responsabilidades y avanzar en un informe final que permita evitar tragedias similares en el sistema de salud argentino.

