Con 63 votos contra 7, el Senado dejó firme la emergencia en discapacidad y marcó un límite político al Gobierno.
Redacción Periodismo Parlamentario ✍️ Diario Digital CM24HORAS.
El gobierno de Javier Milei sufrió este jueves un duro revés institucional: el Senado rechazó el veto presidencial a la ley de emergencia en discapacidad con una mayoría abrumadora de 63 votos contra 7. La norma, que ya había sido respaldada por Diputados en agosto, quedó firme y expuso la fragilidad política del oficialismo en el Parlamento.
Un hecho inédito en más de dos décadas
Desde 2003 ningún Congreso había reunido la fuerza necesaria para anular un veto presidencial. La decisión marca un punto de inflexión en la relación entre el Poder Legislativo y la Casa Rosada: por primera vez, Milei ve truncada su capacidad de imponer agenda.
Discursos que subieron la temperatura
El debate dejó frases de alto voltaje político. El senador José Mayans habló de un “presidente mafioso” y agitó la idea de la destitución. Otros legisladores, como Cristina Cándida López, llevaron la discusión a un tono más callejero al recordar cánticos contra Karina Milei, mientras que el santacruceño José María Carambia amenazó con impulsar un juicio político si el Ejecutivo desoye al Congreso.
En contraste, la bullrichista Carmen Álvarez Rivero defendió el veto y acusó a la oposición de buscar desestabilizar al Presidente, aunque reconoció la urgencia de aumentar aranceles para garantizar prestaciones básicas a las personas con discapacidad.
Una coalición opositora heterogénea
Lo más llamativo fue la transversalidad del voto negativo: radicales, peronistas y disidentes del PRO coincidieron en que el ajuste no puede recaer sobre quienes más necesitan asistencia del Estado. El radical Pablo Blanco habló directamente de “déficit social”, mientras que la senadora Guadalupe Tagliaferri denunció que el recorte en la Agencia Nacional de Discapacidad “no fue para mejorar la eficiencia, sino para alimentar la corrupción”.
El impacto político
El rechazo al veto es mucho más que una victoria parlamentaria de la oposición. Simboliza el primer gran límite institucional al proyecto libertario, y abre interrogantes sobre la capacidad de Milei para sostener sus políticas más controvertidas frente a un Congreso cada vez más dispuesto a marcarle la cancha.
La ley de emergencia en discapacidad ya está en vigencia. Ahora resta ver si el Gobierno se adapta al nuevo escenario o si decide escalar el enfrentamiento con el Parlamento.
Publicidad
